Las pantallas e internet han cambiado las reglas del juego en la lectura: los escritores que dialogan de una manera profunda con el lector comparten mercado con el relato audiovisual, con unos personajes que se amplifican en las redes sociales o con los actores que los dan vida a las pantallas. Gemma Lluch analiza el ecosistema del libro: lectura e identidad, políticas de promoción, formados de lectura, influencia del audiovisual... y alerta sobre la responsabilidad de la administración, pero también sobre la de cada uno de nosotros.
Sólo la educación puede romper un círculo empresarial vicioso que nos propone siempre el mismo tipo de lectura, escrita en las lenguas fuertes del mercado. Hoy, fomentar el hábito de leer, crear nuevos lectores, implica considerar la variedad de formatos y la complejidad de objetivos y finalidades de la lectura.